miércoles, 13 de febrero de 2008

Historias de autobús

Hoy por la mañana un pasajero de mi matutino autobús se ha dejado una mochila. Se trata de un chico extranjero, de habla inglesa, en el cual me fijé el otro día porque venía por primera vez al parque tecnológico y andaba preguntando dónde estaba su edificio, en qué parada se tenía que bajar… tuvo la mala suerte de preguntarle a un tío bastante desagradable, que antes de decir que no tenía ni idea le dijo que ese edificio no existía mirándole con cara de “estás tonto o qué”. El pobre colega se quedó con cara de póker y yo me quedé pensando en cómo hay gente que puede ser tan antipática.

Yo tampoco sabía muy bien por dónde caía aquel edificio, así que me quedé mirando la situación un tanto impotente pero dispuesta a comentarle en el momento adecuado que se bajara en una parada cercana y que buscara a pié, a lo que se me adelantó otro pasajero que sí sabía dónde estaba su edificio.

El caso es que hoy el pobre foreign-man nada más bajarse del bus, ha pegado un respingo y ha hecho un amago de correr detrás golpeando la puerta, aunque sin éxito, claro. He tenido tiempo de ver la cara de preocupación que se le ha puesto al pollo, pero para cuando me he dado cuenta de la situación, ya era tarde.

La mochila que se había dejado era bastante grande, estilo montaña. Después de dársela al conductor y contarle lo que había pasado, me he bajado en mi parada como cada día aunque esta vez con una extraña sensación de disgusto y agobio. Me he pasado la media hora siguiente pensando en lo que llevaría ese chico en la mochila… ¿Ropa para marcharse de viaje después de trabajar? ¿El ordenador portátil? ¿Documentos importantes?

Supongo que estoy pensando tanto en ello porque he podido ver la cara de agobio del chico y me ha dado rabia que estando tan cerca (de una parada a otra) no haya podido coger la mochila y llevársela yo misma. Supongo que nos puede pasar a todos. Supongo que ya me ha pasado a mi…

7 comentarios:

  1. oh, caperucita, qué de cositas te pasan por tu caminito...

    B4NB4N

    ResponderEliminar
  2. seguro q el foreign man estaba como un tren, si no, ni te fijas...

    quizá fuera un extremista iraní antitecnología y quería volar el parque...y los días anteriores simplemente estaba estudiando el terreno.

    Q bronca q le habrá caído del jefe de su célula.

    LLL

    ResponderEliminar
  3. No te agobies que lo importante es tener la intención de ayudar, darle la mochila al conductor para que nadie se la robe... Aunque entiendo tu sentimiento de mal rollo por no poder echarle un cable.
    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Entiendo que te sientas culpable por no ayudar a un pobre chaval que todavía anda buscando su sitio en un lugar hostil para él, la verdad es que podrías haber hecho algo más por ayudarle, no eres buena persona pero tranquila, se te pasará, el hecho de que te plantees la conveniencia de tus acciones indica que vas por el buen camino pequeña Padaguán :-DDD
    Venga, muy interesante el blog, no te firmo, a ver si adivinas quién soy, creo que te lo he puesto a huevo...

    ResponderEliminar
  5. Mmmm... creo que tengo una ligera idea... aunque lo de "pequeña pagaguán" me confunde... eres... ¿anonimo? jejeje :-)

    ResponderEliminar
  6. Sí, es cierto, ese comentario no va demasiado con mi estilo, quizá debería haber dicho "pequeño saltamontes"...
    Por el momento, hasta que adivines mi verdadera identidad, firmaré como el señor 'X'.
    Saludos.

    Señor 'X' :-DD

    ResponderEliminar

Vamos... alégrame el día...